
Alphonse Mucha (Alfons-Marie Mucha) nace el 24 de julio de 1860 en Ivanci, en Moravia (hoy República checa) en una familia numerosa de la pequeña burguesía.
Desde muy joven dibuja constantemente y suele caricaturizar a sus compañeros. Después de terminar el instituto, toca como violinista en la catedral de Brno. Por ser tan buen calígrafo como dibujante, le contratan de escribano en el tribunal donde su padre ejerce de ujier. A los 19 años se traslada a Viena donde le contrata la casa Kautsky-Brioché-Burghardt, especializada en los decorados de teatro. Al cerrar esta casa Mucha se instala en Mikulov donde pinta paisajes, retratos, y realiza inscripciones para lápidas funerarias.
El Conde Khuen Belasy, de Grusbach, quien se convirtió en su mecenas, le encarga unos frescos para su castillo que le tendrán un año ocupado; dicho trabajo agrada mucho lo que le permite ser admitido entre la nobleza local. Mucha, en 1885, entra a la Academia de Artes de Munich por dos años.


Sus pósters, avisos e ilustraciones, y sus diseños para joyería, alfombras, empapelados y decorados teatrales acabaron por conocerse como Art Nouveau. Se muestra en muchos de ellos mujeres jóvenes, hermosas y muy saludables, que flotan entre exuberantes flores.
Su arte nunca pasó realmente de moda y desde todas las corrientes modernistas europeas al art decó bebieron directamente de su estilo. Evidente es su influjo en, por ejemplo, los carteles hippies de los años 60 o la huella masiva del artista en toda la ilustración desde 1900 hasta hoy.
